Hay una serie de claves para realizar una dieta preventiva con la que evitar determinados tipos de cáncer. Un experto de la Universidad de Harvard, nos informa de la importancia de llevar una dieta equilibrada y nos advierte sobre las dietas altas en grasa y con ausencia total de vegetales, ya que pueden elevar hasta un 35% el riesgo de padecer algún tipo de cáncer.
Además, nos expone algunos ejemplos como la consecuencia de ingerir menos fibra unida al abuso del alcohol, esta combinación propicia aumentar las posibilidades de padecer un cáncer de esófago, hígado o laringe.
Como muchos expertos en nutrición, también recomienda reducir el consumo de sal y beber abundante agua. Claro, que no sólo podemos hablar de alimentación, son muchos los factores que influyen para que aumente el riesgo de padecer cáncer como puede ser el tabaquismo, la herencia genética, etc. La alimentación es uno de los factores clave, debe ser variada donde intervengan todo tipo de alimentos, acompañar esta conducta con una actividad física adecuada y unas normas de conducta saludables propiciarán un menor riesgo de padecer algún tipo de cáncer.
Hay que tener en cuenta una cosa, si nos concienciamos de la importancia de seguir estos consejos y nuestro estilo de vida es totalmente diferente a ellos, debemos realizar un cambio de forma gradual, pues los cambios drásticos, aunque sean para mejor, no son nada recomendables.
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