The Burger Lab en Madrid

No os creáis que voy a comer todos los días hamburguesas, pero es que después de comer en Peggy Sue´s necesitaba desquitarme un poco con otro estilo de hamburguesas. Así que, quedé con un amigo, Luis, que sabe mucho de hamburguesas, para ir a conocer un nuevo local que ha abierto hace un tiempo en Madrid capital, después de contar ya con un local en Pozuelo, se trata de The Burger Lab.

Al entrar al local ya se percibe un cambio de tendencia con respecto a otras hamburgueserías. Aquí tenemos un ambiente que da una sensación más minimalista, menos recargada que otras hamburgueserías y donde sobran elementos adicionales, como podría ser el de una carta, que es el propio “tapete” que encuentras en la mesa. El local es pequeño y la solución para aprovechar el sitio es el de compartir mesa como ya hacen otros muchos locales.

Un vistazo a…

SMASH BURGER

Las hamburguesas de The Burger Lab

El lema de The Burger Lab es “Una hamburguesa para cada paladar. Un experimento culinario que te sorprenderá con sabores nuevos”. Y ese es precisamente el encanto de un local donde a lo que más importancia se le da es a la hamburguesa, ya que nos encontramos con once tipos de hamburguesas para todos los gustos.

Por poner una pega, la carta carece de unos entrantes y postres atractivos. En especial, y es algo que comentamos con Yanet Acosta, periodista y escritora gastronómica, que llegó más tarde. Uno espera, después de comer una buena hamburguesa terminar con un gran postre. Pero bueno, al menos en The Burger Lab podemos volver de nuevo, otro día, y sentir que podemos probar algo nuevo debido a la variedad de hamburguesas: pollo tantoori, buey, canguro, ibérica, avestruz, ciervo, salmón, tofu, merluza, Hamburgo y la Maxi Lab una doble de buey.

Los precios de las hamburguesas van desde los 5,7 euros de la de pollo tandoori hasta los 9,5 de la maxi lab. Cada hamburguesa va con una combinación de ingredientes diferentes y con unas patatas diferentes. Por ejemplo, patatas cubo, chips, french fries, bravas o asada con ali oli.

Las hamburguesas que comimos, bueno, yo solo una pero probé la de Luis, fueron… Primero la mía. A mi, que me van las cosas exóticas, pedí una hamburguesa de canguro que estaba aderezada con ajo, cúrcuma, enebro y llevaba champiñón, cebolla roja, cheddar rojo, una salsa de reducción de acetato balsámico y de acompañamiento unas patatas cubo.

Por poner alguna pega, pero vamos, que es una tontería. Me pareció un poco pequeña la hamburguesa para el precio que tiene. Aunque al final salí bastante bien, no lleno como es de esperar cuando uno come hamburguesas, pero satisfecho. La hamburguesa muy, muy tierna, eso sí y muy sabrosa. El pan tostado, lo que le otorga un poco más de robusted.

Luis pidió una Maxi Lab. Que es la hamburguesa de buey, pero doble. La verdad que no lo indica la carta, es decir, ellos ponen que son 300 g de carne de buey, por lo que fue sorpresa que llegase una torre como esa, que se hace, obviamente, misión imposible de comer con las manos. Pero a Luis, no hay hamburguesa que se le resista. Tal vez, sería interesante conseguir la misma hamburguesa en una pieza unicamente y con un pan de más grande. Aunque, tendré que esperar a su crónica para ver qué tal.

Yanet, que llegó cuando habíamos terminado, se pidió una hamburguesa de Tofu. Que lleva, tofu, soja, cebolla, ajo, zanahoria, huevo, pan, nata, champiñones, judías verdes y tomate. Y aunque no la probé, ella aseguró que estaba rica y jugosa.

En definitiva, tal vez no sean las mejores hamburguesas de Madrid, pero al menos si que es un sitio al que tener en cuenta y al que le faltarían solo algunas cosas. Otros tamaños de hamburguesas y panes, y algún entrante y postre más atractivos o clásicos. En esas cosas hay que jugar a caballo ganador, y una porción de una buena tarta de queso o un brownie siempre es interesante.

De todas formas, hay que volver, que a mi me quedan 10 hamburguesas por probar, y eso es mucho trabajo.