Miedito me da. Cuando un señor con bata blanca me mira por encima de unos papeles y me dice: habrá que hacer una resonancia, miedito me da. No lo puedo evitar, tengo claustrofobia, y los cuarenta minutos que pasé encerrada en mi primera tortura magnética me dejaron muy marcada. Qué más quisiera yo que poder sustituir en esas ocasiones mi maltrecho cuerpo por una coliflor o una piña dentro del tubo maligno.
Que soporten ellas el encierro, que disfruten del bakalao maquinero que ambienta este tipo de sesiones. A partir de ahora, cuando me encierren en el tubo pensaré en ellas. Que conste que no estoy presa del delirio, ni tengo resentimiento contra cucurbitáceas y cítricos, muy al contrario. Simplemente me he topado con Inside Insides, un blog en el que muestran resonancias hechas con verduras y frutas, creando animaciones muy bellas, y pudiendo conocer el interior de estas.
Las secciones de nuestro cerebro, extremidades, o abdomen, se cambian por los cortes de kiwis, pepinos o sandías. Otra manera de ver las frutas y verduras, esta vez de manera muy íntima. Para que luego digan, mira que son valientes las tías.
Vía | Tacones sin tapas
Más información | Inside Insides
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