¿A quién no le gusta la ensalada César? Es todo un clásico entre ese tipo de ensaladas que podemos servir como plato único, pues llevan un poco de todo, especialmente si preparamos esta receta de ensalada César de pasta, a la que, como podéis imaginar por el nombre, se le añade un poco de pasta para redondear su sabor.
Aunque en esencia es una ensalada César normal con el extra de la pasta, cambia bastante al introducir la textura más tersa de la pasta (he utilizado espirales) que combina perfectamente con el resto de sabores y texturas de la ensalada.
Empezamos poniendo el agua a hervir. Mientras tanto, fileteamos la pechuga en filetes gruesos, la embadurnamos en huevo batido y la pasamos por el pan rallado. Si os gusta bien crujiente, podemos volver a pasarla por el huevo batido y otra vez por el pan.
Cuando el agua rompa a hervir, añadimos abundante sal y la pasta. Cocemos durante el tiempo que indique en el paquete, escurrimos y dejamos enfriar. Por otro lado, freímos las pechugas de pollo en abundante aceite, hasta que estén doradas. Retiramos y las colocamos en un plato con papel de cocina para que se escurra el aceite sobrante.
Por último, montamos la ensalada. En un cuenco del tamaño adecuado, echamos el mix de lechugas o mezclum, los tomates cherry partidos, la pasta, los croutons y las pechugas troceadas. Añadimos la salsa César (aquí tenéis la receta de salsa César por si queréis hacerla en casa) y rematamos con un poco de queso parmesano rallado.
Con qué acompañar la ensalada César de pasta
La ensalada César de pasta es una receta perfecta cuando queremos una ensalada completa que sirva como plato único y que, además de estar deliciosa y aportarnos todo lo necesario para seguir con energía el resto del día, nos deje la conciencia tranquila porque solo nos hemos comido una ensaladita.
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