Uno de mis platos preferidos son los escabeches. De carne, de pescado o vegetales me encanta ese sabor ácido que les proporciona el vinagre, y me parecen una opción perfecta para darle un plus de sabor a cualquier ensalada.
Ahora en el verano en donde los platos fríos están a la orden del día, las codornices en escabeche como las que os traigo hoy, forman parte de mi fondo de despensa.
Además, aparte de que son muy sencillas de preparar, resulta mucho más económico hacerlas en casa, pues el precio de esas pequeñas latas con una o dos codornices, me parece casi siempre excesivo.
Comenzaremos preparando las codornices, limpiándolas de grasillas y plumas. En una cazuela ponemos el aceite a calentar, y en él doraremos las codornices. Cuando estén doraditas las retiramos y reservamos.
Quitamos la mitad del aceite y ponemos la cebolla picada en trozos grandes, las zanahorias peladas y en rodajas, el tomillo, el laurel, el perejil y los dientes de ajo. Añadimos también los granos de pimienta y las codornices de nuevo, rehogando todo junto durante quince minutos a fuego medio.
Una vez que pase el tiempo se añade el vino blanco y el vinagre, se añade agua hasta que cubra las codornices y se cuece todo junto y tapado a fuego lento durante una hora.
Con qué acompañar las codornices en escabeche
Las codornices en escabeche se sirven frías acompañadas de su propia salsa. Podéis conservarlas en un recipiente hermético durante unos días retirando las verduras de la salsa, pero también congelan perfectamente para tenerlas listas siempre que os apetezcan.
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